Una de las maneras en las que nos puede afectar la ansiedad es en el tema de la comida. Si te preguntas cómo quitar la ansiedad por comer, seguramente sea porque te has dado cuenta de que cuanto más inquieto y nervioso te sientes notas más hambre de lo normal.
Y todos sabemos qué es lo que viene después: te diriges a la nevera y empiezas a comer y a comer hasta que ya no puedes más. Arriesgándote a tener una indigestión, padecer estreñimiento y aumentar de peso, por no citar otros problemas más graves.
Quitar la ansiedad por comer no es algo fácil, pero se puede conseguir si de verdad queremos cambiar y entendemos los procesos a través de los cuales nuestro cerebro nos lleva a caer en la ansiedad por comer.
Es decir, aunque tengas sensación de hambre, no es que tu cuerpo en realidad necesite más nutrientes en ese momento. Eso lo sabemos, aunque lo que no acabamos de entender muy bien es por qué tenemos unas ganas compulsivas de alimentarnos y cómo quitar la ansiedad por comer. En realidad, en nuestro caso todo esto tiene que ver con el cerebro humano.
Existe una hormona llamada dopamina, un neurotransmisor químico que representa el centro neurálgico del placer, la motivación y el sistema de recompensas de nuestro cerebro. Hay determinadas actividades, como la comida, el ejercicio físico o el sexo que ayudan a liberar dopamina. Por explicarlo de manera sencilla, cuando se produce una explosión de dopamina en nuestro cerebro, sentimos placer y tendemos a repetir esa conducta.
Y ahí está el quid de la cuestión: las personas que tienen ansiedad, especialmente las que tienen ansiedad social, suelen tener niveles muy bajos de dopamina. Eso provoca que tiendan a caer en adicciones, como comer de forma compulsiva, ya que esto les ayuda a compensar los bajos niveles de dopamina.
El problema, claro está, es que se crea un círculo vicioso que nos lleva a la ansiedad por comer. Y nos da a entender que lo que nos produce placer a corto plazo no siempre es bueno para nosotros si no se hace de manera moderada y regularizada, más allá de la sensación placentera de comer.
Una vez que entendemos que hemos caído en una adicción, en una trampa del cerebro motivada por nuestra ansiedad, debemos aplicar algunas técnicas para regular nuestros niveles de dopamina en el cerebro.
Además, hay otra hormona, la serotonina, que cuando tenemos a un bajo nivel, también es una de las causantes de que tengamos problemas para dormir, ya que se convierte en un compuesto llamado "melatonina". Si recuerdas, en un post anterior te hablábamos del insomnio por ansiedad.
Podemos regular el nivel de estas hormonas en nuestro cerebro realizando actividades sanas, como hacer deporte o conocer nuevos amigos, lo que forma parte de este proceso para superar la ansiedad. Aprender a manejar nuestros pensamientos y sentirnos bien con nosotros mismos también nos ayudará a sentir más satisfacción personal en las pequeñas cosas de cada día y no buscar el placer en adicciones y ansiedad por la comida.
La ansiedad por comer viene a ser como una válvula de escape ante un problema de otra índole. No necesariamente ha de proceder de esta vía, pero si tienes ansiedad social, fobia social, baja autoestima, etc., es muy importante que sigas alguna terapia para superar tu problema.
Si quieres saber cómo quitar la ansiedad por comer, contempla también la posibilidad de acudir a un psicólogo, conoce a otras personas con ansiedad social por Internet y realiza algún curso o programa que te ayude a entender mejor los mecanismos de la ansiedad y cómo puedes superarla. Uno que es muy popular es el método Vive sin ansiedad, de Erick Gutiérrez, una persona que lo ha vivido por sí mismo, lo ha superado y sabe muy bien de lo que habla.
Con todo, hay algunos consejos que te pueden ayudar a llevar una dieta para la ansiedad más adecuada.
1. Haz ejercicio físico de forma regular. Además de que estarás cuidando tu salud, te ayudará enormemente a aumentar el nivel de dopamina y serotonina en tu cerebro sin estar haciendo nada que te perjudique.
2. Toma alimentos que generen sensación de saciedad. Bebe mucha agua y toma mucha fruta a lo largo del día. Notarás que no tienes tanta hambre, incluso en los momentos de mayor tensión, ya que notarás que tienes el estómago lleno.
3. Cuida mucho la lista de la compra. Ojos que no ven, boca que no come. Si tu nevera está llena de alimentos ricos en grasas y productos con azúcar, ten por seguro que cuando llegue el ataque de ansiedad por comer, esos alimentos acabarán en tu estómago. Lleva una dieta sana y, directamente, no compres lo que te puede perjudicar.
4. Sal a caminar. Hay un pequeño truco que puedes acostumbrarte a hacer. Cada vez que sientas una crisis de ansiedad por comer, sal a la calle. Date un paseo, deja que te dé el sol y camina durante un largo rato hasta que te sientas mejor. Es algo que a mí me ha ayudado mucho: controlar el lugar en el que estoy.
5. Evita las bebidas azucaradas. Las bebidas azucaradas son un verdadero peligro, ya que si te has vuelto adicto a ellas, estarás consumiendo una cantidad de azúcar muy superior a la que necesitas por día. Y como es una bebida, no te das tanta cuenta. Pero si tomas una botella de 2 litros de coca-cola a diario, ten por seguro que estás dañando tu salud. Esto también es ansiedad, aunque sea ansiedad por beber.
En definitivas cuentas, hemos de aprender a superar nuestra adicción por los alimentos. No hay nada que te vaya a saciar más y producirte más felicidad que "coger el toro por los cuernos", como decimos en español. En este caso, "el toro de la ansiedad".
¿Vas a enfrentarte a él y llevar una vida más sana? Espero que sí y que tú también me acompañes en este camino.
Y todos sabemos qué es lo que viene después: te diriges a la nevera y empiezas a comer y a comer hasta que ya no puedes más. Arriesgándote a tener una indigestión, padecer estreñimiento y aumentar de peso, por no citar otros problemas más graves.
Quitar la ansiedad por comer no es algo fácil, pero se puede conseguir si de verdad queremos cambiar y entendemos los procesos a través de los cuales nuestro cerebro nos lleva a caer en la ansiedad por comer.
¿Qué pasa en tu cerebro cuando tienes ansiedad por comer?
Es decir, aunque tengas sensación de hambre, no es que tu cuerpo en realidad necesite más nutrientes en ese momento. Eso lo sabemos, aunque lo que no acabamos de entender muy bien es por qué tenemos unas ganas compulsivas de alimentarnos y cómo quitar la ansiedad por comer. En realidad, en nuestro caso todo esto tiene que ver con el cerebro humano.
Existe una hormona llamada dopamina, un neurotransmisor químico que representa el centro neurálgico del placer, la motivación y el sistema de recompensas de nuestro cerebro. Hay determinadas actividades, como la comida, el ejercicio físico o el sexo que ayudan a liberar dopamina. Por explicarlo de manera sencilla, cuando se produce una explosión de dopamina en nuestro cerebro, sentimos placer y tendemos a repetir esa conducta.
Y ahí está el quid de la cuestión: las personas que tienen ansiedad, especialmente las que tienen ansiedad social, suelen tener niveles muy bajos de dopamina. Eso provoca que tiendan a caer en adicciones, como comer de forma compulsiva, ya que esto les ayuda a compensar los bajos niveles de dopamina.
El problema, claro está, es que se crea un círculo vicioso que nos lleva a la ansiedad por comer. Y nos da a entender que lo que nos produce placer a corto plazo no siempre es bueno para nosotros si no se hace de manera moderada y regularizada, más allá de la sensación placentera de comer.
¿Cómo quitar la ansiedad por comer?
Una vez que entendemos que hemos caído en una adicción, en una trampa del cerebro motivada por nuestra ansiedad, debemos aplicar algunas técnicas para regular nuestros niveles de dopamina en el cerebro.
Además, hay otra hormona, la serotonina, que cuando tenemos a un bajo nivel, también es una de las causantes de que tengamos problemas para dormir, ya que se convierte en un compuesto llamado "melatonina". Si recuerdas, en un post anterior te hablábamos del insomnio por ansiedad.
Podemos regular el nivel de estas hormonas en nuestro cerebro realizando actividades sanas, como hacer deporte o conocer nuevos amigos, lo que forma parte de este proceso para superar la ansiedad. Aprender a manejar nuestros pensamientos y sentirnos bien con nosotros mismos también nos ayudará a sentir más satisfacción personal en las pequeñas cosas de cada día y no buscar el placer en adicciones y ansiedad por la comida.
La ansiedad por comer viene a ser como una válvula de escape ante un problema de otra índole. No necesariamente ha de proceder de esta vía, pero si tienes ansiedad social, fobia social, baja autoestima, etc., es muy importante que sigas alguna terapia para superar tu problema.
Si quieres saber cómo quitar la ansiedad por comer, contempla también la posibilidad de acudir a un psicólogo, conoce a otras personas con ansiedad social por Internet y realiza algún curso o programa que te ayude a entender mejor los mecanismos de la ansiedad y cómo puedes superarla. Uno que es muy popular es el método Vive sin ansiedad, de Erick Gutiérrez, una persona que lo ha vivido por sí mismo, lo ha superado y sabe muy bien de lo que habla.
Con todo, hay algunos consejos que te pueden ayudar a llevar una dieta para la ansiedad más adecuada.
5 consejos para quitar la ansiedad por la comida
Veamos algunos consejos que te pueden ayudar a regular un poco a quitar la ansiedad por comer.1. Haz ejercicio físico de forma regular. Además de que estarás cuidando tu salud, te ayudará enormemente a aumentar el nivel de dopamina y serotonina en tu cerebro sin estar haciendo nada que te perjudique.
2. Toma alimentos que generen sensación de saciedad. Bebe mucha agua y toma mucha fruta a lo largo del día. Notarás que no tienes tanta hambre, incluso en los momentos de mayor tensión, ya que notarás que tienes el estómago lleno.
3. Cuida mucho la lista de la compra. Ojos que no ven, boca que no come. Si tu nevera está llena de alimentos ricos en grasas y productos con azúcar, ten por seguro que cuando llegue el ataque de ansiedad por comer, esos alimentos acabarán en tu estómago. Lleva una dieta sana y, directamente, no compres lo que te puede perjudicar.
4. Sal a caminar. Hay un pequeño truco que puedes acostumbrarte a hacer. Cada vez que sientas una crisis de ansiedad por comer, sal a la calle. Date un paseo, deja que te dé el sol y camina durante un largo rato hasta que te sientas mejor. Es algo que a mí me ha ayudado mucho: controlar el lugar en el que estoy.
5. Evita las bebidas azucaradas. Las bebidas azucaradas son un verdadero peligro, ya que si te has vuelto adicto a ellas, estarás consumiendo una cantidad de azúcar muy superior a la que necesitas por día. Y como es una bebida, no te das tanta cuenta. Pero si tomas una botella de 2 litros de coca-cola a diario, ten por seguro que estás dañando tu salud. Esto también es ansiedad, aunque sea ansiedad por beber.
En definitivas cuentas, hemos de aprender a superar nuestra adicción por los alimentos. No hay nada que te vaya a saciar más y producirte más felicidad que "coger el toro por los cuernos", como decimos en español. En este caso, "el toro de la ansiedad".
¿Vas a enfrentarte a él y llevar una vida más sana? Espero que sí y que tú también me acompañes en este camino.